Fruta del monje
Con el paso del tiempo, el mundo de los endulzantes ha ido cambiando considerablemente y se ha nutrido de nuevos ingredientes, buscando soluciones más saludables. En este contexto, no es casualidad que la fruta del monje se haya convertido en uno de los endulzantes más populares en el mundo. A continuación, te vamos a contar todo lo que debes saber sobre esta fruta, sus propiedades y sus beneficios para la salud.
¿Qué es el fruto del monje?
En pocas palabras, podemos decir que la fruta del monje o fruto del monje es una planta nativa de las zonas de Tailandia y China. Conocida también como Siraitia Grosvenorii o Luohan Guo, la planta de la fruta del monje pertenece a la familia de las cucurbitáceas. Si bien actualmente se ha popularizado considerablemente, lo cierto es que las primeras menciones a este fruto aparecen en registros de los antiguos monjes chinos de la región de Guilin en el siglo XIII.
Con el paso del tiempo, la fruta del monje comenzó a ser utilizada en esa zona como un remedio natural, especialmente para tratar problemas como el dolor de garganta, los resfriados y el estreñimiento. Mucho tiempo más tarde, este remedio llegaba también a Occidente, en particular a Inglaterra, donde, en el siglo XX, se empezaba a usar también con fines medicinales, pese a no conocer detalladamente sus posibilidades y beneficios. Hoy en día, este uso medicinal sigue vigente, especialmente en países como China y Taiwán, pero se emplea especialmente para el tratamiento de dolores y de determinadas enfermedades.
El azúcar de la fruta del monje
Pese a lo dicho anteriormente, hoy en día, uno de los usos más extendidos de la fruta del monje tiene que ver con su aplicación como endulzante, en reemplazo del azúcar convencional. El azúcar de la fruta del monje se obtiene a través de un proceso mediante el cual se eliminan sus semillas y su piel para obtener el jugo. Así, se obtiene una sustancia de color café que funciona como endulzante y que es considerablemente más dulce que el azúcar normal, pero siendo mucho más saludable y no conteniendo calorías por porción.
El crecimiento de este uso se ha atribuido a una tendencia creciente en las sociedades actuales por buscar alimentos más naturales y dejar de lado los procesados. Así, el azúcar de la fruta del monje se emplea cada vez más como endulzante para reemplazar al azúcar convencional que es perjudicial para la salud de las personas.
Beneficios de la fruta del monje
Ahora que hemos visto en qué consiste la fruta del monje y su aplicación como endulzante, queremos contarte acerca de los beneficios que este fruto tiene para ofrecer y que son los que están llevando a su uso cada vez más extendido. Los más importantes son:
Es un poderoso endulzante natural
Ya hemos dicho previamente que la fruta del monje se caracteriza por ser un endulzante natural cuando se procesa su jugo. El dulzor de esta fruta proviene de los mogrósidos, que son compuestos glucósidos que se extraen de distintas plantas y que se utilizan como sustitutos del azúcar convencional. Esto es mucho más saludable que otros endulzantes que se utilizan con frecuencia.
Se aprovecha todo el fruto
A diferencia de lo que puede suceder con otros frutos, en la fruta del monje, la cáscara también tiene usos. Con frecuencia, esta cáscara es utilizada para realizar infusiones. Muchas de estas se aplican con fines medicinales, especialmente para curar infecciones, dolores de garganta o malestares propios del sistema digestivo.
Tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y anticancerígenas
Uno de los aspectos más destacados de la fruta del monje tiene que ver con sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Es por eso que se utiliza con frecuencia para infusiones orientadas a curar el dolor de garganta o la tos. Pero, además, posee propiedades anticancerígenas, debido a que sus propios antioxidantes ayudan a prevenir la aparición de dichas células. Por eso, si bien sus efectos en este sentido no están comprobados y no se emplea con motivos curativos, lo cierto es que sí se recomienda su incorporación en la dieta diaria en reemplazo de otros endulzantes artificiales.
No posee calorías
A diferencia de lo que pasa con otros endulzantes convencionales, no se detectan calorías por porción en el endulzante de la fruta del monje. Por eso, muchos nutricionistas recomiendan reemplazar otros endulzantes con este en los casos de personas que están buscando bajar de peso o reducir su consumo diario de calorías.
Es apto para personas con diabetes
Finalmente, es importante destacar que, en los casos de personas con diabetes que no pueden acudir al azúcar convencional y a otros endulzantes, la fruta del monje sí es apta, pudiendo utilizarse como alternativa para endulzar en quienes viven con esta enfermedad.
Usos de la fruta del monje
Ya que conoces los beneficios de la fruta del monje, queremos contarte ahora algunas ideas que puedes tener en cuenta para utilizar este endulzante e incorporarlo a tu vida diaria.
Para endulzar bebidas
Especialmente en reemplazo del azúcar y de los endulzantes artificiales, una de las formas más tradicionales de incorporar la fruta del monje es como endulzante de bebidas. Se puede emplear en distintas opciones, desde café hasta té y otros preparados.
Para hornear
En el mismo sentido, es cada vez más común ver que se acude a la fruta del monje como endulzante para hornear. Se puede aplicar en prácticamente cualquier receta de la forma en que se aplicaría el azúcar, siempre buscando el equilibrio y comprendiendo que el endulzante de la fruta del monje es mucho más dulce que el azúcar convencional. En lo que refiere a su sabor como endulzante, este se asemeja más a lo que es el azúcar morena natural y menos al azúcar refinada.
Para tés
Para terminar, otro de los usos comunes de la fruta del monje es empleando su cáscara para hacer distintos tés. Estos pueden consumirse tanto por gusto como con fines medicinales, especialmente en los momentos en los que se sufre de dolores de garganta o resfríos. Además, se puede utilizar el endulzante del fruto para endulzar estos mismos tés.