¿Cómo limpiar las gomas de la mampara?
Cuando vamos a limpiar la casa, especialmente en ese día de la semana en que nos dedicamos a la limpieza profunda de todos sus rincones, hay partes que nos pueden dar mucho más trabajo que otras. Esto, especialmente en los casos de aquellas partes de la casa que solemos subestimar u olvidar cuando hacemos la limpieza y que, por lo tanto, tienden a acumular una mayor cantidad de suciedad. Tal es el caso de la mampara de la ducha y, en particular, de las gomas de la mampara. ¿Cuántas veces has limpiado el baño y te has olvidado de limpiar las gomas de la mampara? Bueno, en esta ocasión, vamos a contarte cómo hacerlo de forma sencilla para que puedas obtener los mejores resultados y mantener las gomas en buen estado por más tiempo.
Limpiar las gomas de la mampara sin productos abrasivos
Lo primero que debemos tener en cuenta es que, al igual que sucede con otras gomas que podemos encontrar en la vivienda, la suciedad acumulada y el contacto permanente con el agua pueden llevar a que estas se pudran. Por eso, la mejor forma de mantener las gomas de la mampara en buen estado por más tiempo es llevando a cabo una limpieza periódica sobre ellas.
Al igual que sucede con otras superficies del hogar, siempre es indispensable tener en cuenta el tipo de material frente al cual nos encontramos para elegir los productos y los métodos más adecuados para limpiarlo. En este caso, para las gomas de la mampara, se recomienda siempre evitar los productos abrasivos como pueden ser el amoníaco, los limpiadores industriales o la lejía, que pueden producir daños sobre el material y hacer que este vaya perdiendo efectividad con el paso del tiempo. Además, en el caso particular de la goma de la mampara, estos productos pueden llevar a que cambie de color hacia el amarillo y que, si no se aclaran bien, acaben “comiéndose” la goma.
En este sentido, una de las mezclas más exitosas para limpiar las gomas de la mampara es la de agua con vinagre blanco y limón. De hecho, es una mezcla que podría utilizarse también para limpiar la mampara en sí misma. En el caso de la goma, lo mejor es utilizar un cepillo de dientes viejo que nos permita frotarla con esta mezcla alcanzando incluso los rincones más difíciles. Es muy importante que, si se va a usar la misma mezcla para las gomas que para las hojas, no se utilice el cepillo para estas últimas, debido a que puede dejar marcas en el material. En el caso de la hoja siempre será mejor usar una esponja suave o un paño. Una vez limpiadas las gomas con esta mezcla, solamente será necesario aclarar.
Limpiar las gomas de la mampara cuando están negras o amarillentas
A veces, sea por el paso del tiempo sin un buen mantenimiento o por el contacto de la goma con agua y otros productos, esta puede adquirir un color negro o amarillento. Te vamos a contar cómo limpiar las gomas de la mampara en caso de que esta sea la situación.
Para gomas amarillentas
Si la goma de la mampara, al retirarse para su limpieza, se observa de un color amarillo, lo mejor es acudir a una solución como la mencionada anteriormente, de agua con vinagre blanco y limón. Vamos a seguir exactamente el mismo proceso de pasar esta solución a lo largo de toda la goma (siempre cuidando de no dejar partes sin limpiar) utilizando un cepillo de dientes viejo que nos permita llegar a todas partes.
Algo que hay que tener en cuenta es que elementos como la goma de la mampara tienden a envejecer por distintas circunstancias como el simple paso del tiempo o la exposición a la luz, como así también por la retención de humedad. Por eso, si al limpiarlos se utilizan productos abrasivos, estos pueden acabar rompiendo la goma.
Para gomas negras
Por otra parte, a veces, cuando retiramos las gomas de la mampara, podemos encontrarnos con que estas tienen partes negras. Estas aparecen cuando se ha dado una acumulación de moho, por lo que es muy importante limpiarlo debido a que no sólo afecta estéticamente al baño sino que puede ser perjudicial para las personas.
Habitualmente, el mismo proceso mencionado más arriba puede funcionar para este tipo de manchas. Además, se puede emplear una mezcla con un poco de alcohol para dejar la goma en buen estado. En algunos casos, se puede acudir a productos como la lejía, aunque siempre aclarando muy bien y teniendo en cuenta que estos pueden llevar a un desgaste mucho más veloz de la goma o a que esta adquiera un tomo amarillo no por suciedad sino por desgaste.
En lo que respecta a la prevención, siempre se recomienda limpiar periódicamente la goma y ventilar el baño después de la ducha manteniendo secos los elementos, a fin de evitar que se pueda dar esta acumulación de moho.
¿Cuándo cambiar las gomas de la mampara?
Si se observa que la goma está mucho más fina que antes, que la mampara no queda bien cerrada o que el tono amarillento no puede retirarse, puede que sea momento de simplemente cambiar las gomas de la mampara. En este caso, siempre es muy importante acudir a aquellas que sean específicas para ese tipo de mampara, a fin de evitar problemas en su funcionamiento. Después, se deberá proceder con un mantenimiento adecuado y periódico siguiendo los pasos mencionados más arriba, a fin de garantizar una buena vida útil de las nuevas gomas.